Sopa de ideas

Hola de nuevo! ya tenía unos días que no escribía nada porque a pesar de que me han pasado muchas cosas, no me sentía preparada para escribir algo.
Les contaré los estragos de desvelarse entre semana y sin posibilidad de levantarse tarde al día siguiente. Tuve dos días de unos sueños muy extraños y que prefiero no detallar porque espero que de verdad no se cumplan, sólo les puedo decir que la anestesia dentro de los sueños es un fraude y que a veces nuestros sueños se pueden convertir en retratos de la vida diaria.
Debo admitir que me espanté y a la ves tuve una reacción adversa, pues en el post anterior les había hablado de un nuevo re-comienzo y pues creo que desperté como antes de que todo eso sucediera.
A partir de ese día volví a sentir las mariposas, no quiere decir que las hubiera dejado de sentir ya, sino que esta vez regresaron a todo lo que da y con un sentimiento de cariño impresionante.
Es por eso que pienso que me estoy volviendo loca, jajaja... quizás un poco volátil o cambiante y creo que eso no está tan padre para él.
Hoy me regañaron y pude comprender lo equivocada que estaba y que en verdad no era la única que sentía.
De nuevo siento que retomé el camino pero con un paso delante y esta vez no voy sola como torpemente me llegué a sentir...
¿Alguna vez les ha pasado algo así? es algo así como en las películas; cuando aparece esa dicotomía  de la buena y mala consciencia sobre los hombros del personaje.
Sí...definitivamente me siento así, siento a dos personas peleando por aconsejarme mejor y que esas personas soy yo misma dentro de una confusión que esta constantemente enfrentándose y dejando aflorar la bipolaridad que reside en mí.
Al final de la tormenta siempre me siento confortada con sus melodías y palabras que me hacen salir de la hipnosis, como si estuviera en un diván contándole todo lo que me aqueja y él me escuchara sin decir palabra hasta que me canse de hablar.
De verdad admiro la paciencia que algunos me tienen y sobretodo él siendo una mujer tan enredada y complicada y que tengan las palabras exactas para hacerme entrar en razón cuando estoy bien y cuando no.
Son este tipo de situaciones las que me hacen despertar y descifrar tantos sueños tan extraños que a veces me persiguen y que a veces se necesitan días para llegar a comprenderlos.
Tengo guardados en el baúl de mi psique tantos sueños que siguen sin tener sentido para mí...o tal vez ya lo tienen y simplemente no me di cuenta en que momento sucedió.
Parezco trastornada pero no, me siento liberada cuando platico o cuando lloro, cuando me siento en mi cama por las noches con las luces apagadas y escuchando música que pareciera sacada de mundos paralelos donde los ritmos son suaves pero atrevidos y con mucho mensaje tras bambalinas.
Me gustaría poder volar hasta ese lugar de tonalidades rojas y azules y altos edificios donde estoy segura me sentiría protegida y libre.
Tal vez lo logre más pronto de lo que creo y al fin conozca lo que tanto anhelo y comparta con la gente que quiero compartirlo.
Quisiera tantas cosas....pero todavía no soy tan mayor como para sentirme frustrada, es más, ni siquiera esa gente debe sentirse así. Tengo la teoría comprobada de que nada es imposible mientras se tenga vida y ganas, al fin encontré el sentido de esa frase que tanto me decían mis padres y que a la fecha lo siguen diciendo. Es como un recordatorio de que podría no estar tan loca como pareciera o podría no estar haciendo castillos en las nubes como aparento.
Todo puede tomar forma mientras cierre mis ojos y me visualice en el momento y lugar que quiero, y colgarlo tras mis párpados para que cuando duerma pueda recordarlo siempre.





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